El portugués mohíno

Se ha hablado bastante del carácter del portugués en los comentarios de la entrada anterior. Pero nadie ha nombrado la palabra Saudade. Lo mismo se ha hecho a conciencia, igual que en "El Padrino" nunca se dice la palabra "Mafia", pero igual la Saudade ya no es tan conocida. Aunque nada es (o fue) más portugués.  O eso dice mi padre.

"Saudade" ha atravesado fronteras, pero nunca la he oído aplicada a algo que no sea Portugal o sus habitantes. La RAE española la define como: Soledad, nostalgia, añoranza. Y leyéndolo así, diría que el que la definió tenía un día minimalista. Esas dos comas separando tres palabras deberían sustituirse por preposiciones. O conjunciones. Porque no deja de ser muy diferente a lo que dice otro escritor (portugués) de esta misma palabra: «bem que se padeçe y mal de que se gosta» (bien que se padece y mal que se disfruta).

La Saudade tiende a confundirse con la morriña gallega. Pero la morriña tiene algo de depresivo que en la saudade se torna en introspectivo, incluso en resignado. Como si un paciente estuviera curado pero supiera que nunca volverá al estado de ánimo previo a la depresión. Aunque en ambos casos (morriña y saudade) hay algo de masoquismo. De quejarse de una cosa y lo contrario. De estar siempre de paso.
Saudade define bien a esta sociedad. O al menos la sociedad de esta ciudad. Nostálgica de lo que ya tiene y puede tocar; solitaria (incluso en la multitud) y esencialmente resignada. Mohína, diría. 
Lo que no he descubierto son los motivos.

3 comentarios:

  1. Leyendo el párrafo tercero de tu entrada, donde comparas "morriña" con "saudade" me ha recordado a esas veces en las que los españoles nos empeñamos en infravalorarnos y autoflagelarnos, aumentando nuestra leyenda negra en el exterior.

    Intenraré explicarme. Considero la autocrítica como una de las mejores herramientas para avanzar y mejorar, pero no la autocrítica que muchas veces nos adjudicamos los propios españoles. No me preocupa que dicha autocrítica nos lleve a pensar que el término "saudade" sea menos deprimente que "morriña", eso no deja de ser más que un matiz, sino que me preocupa en el hecho de que ahora que necesitamos más que nunca vendernos fuera del corralito español, ya vamos con esa actitud en la que todo lo que podemos aportar se encuentra un escalón por debajo del resto de Europa, en cuanto a profesionalidad, trabajo bien hecho, calidad, etc.

    Y para acabar como un buen patriota y contradecirme en todo lo escrito anteriormente voy a terminar mi exposición con un chiste machista, no vaya a leer esto uno de fuera de la Península y se piense que somos gente seria:

    (La mujer resignada, le suelta al marido con el que lleva mas de tres décadas casada....)

    "¡Ay cariño! 33 años casados y nunca me has comprado una pulserita o unos pendientitos de oro...."

    (El marido le responde sin dejar de mirar el partido del siglo y ayudandose de los movimientos con el mando para enfacitar sú respuesta)

    "¡¡Y Yo qué sabía que tú vendías oro ni ná!!"

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  2. Palabra preciosa que descubri con Cesaria Evora. Ni idea de lo que dice la cancion pero me encanta: http://www.youtube.com/watch?v=CkuaF2JrcV4&feature=related

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  3. Vale, es verdad que nos tenemos que querer un poco más a nosotros mismos, individual y colectivamente. Pero si creo que la morriña es depresiva supongo que es porque nunca he vivido en Escandinavia. Versión vaso lleno.

    En cuanto a Cesaria Evora, la verdad es que no la conocía. Y me ha gustado mucho. A ver si en una de estas entiendo lo que dice. Otra que como Compay o Carrillo hizo del cigarro su bandera.

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